Choque en el aire

El cielo se divide en dos bandos con diferentes colores. EL negro y verde de los coleoptera y el rojo intenso de los astrodea. Giran alrededor de ellos sin mezclarse todavía. Forman unos lazos que no parecen tener inicio ni final, a veces se ensanchan para después angostarse. Astrod permanece en el suelo terminando su transformación y Croto escondido y sin la máscara solo atina a observar.

Un ruido intenso parece dividir el cielo en dos, de hecho los insectos se separan al escucharlo. Los coleoptera para alejarse de la fuente del ruido y los astrodea para rodear a Astrod que ya ha terminado de mutar. En el suelo quedan sus corazas negras y patas marrones, ahora dobla su tamaño y sus dos pares de alas rojas vibran freneticamente.

Las astrodea tienen sus aparatos reproductores entre sus pares de alas. Las agitan fuertemente y un gas intenso de color azul se expande por una distancia de hasta diez kilometros. Las hembras astrodea solo necesitan recibirlo para después de unas horas poder poner huevos. El gas es extremadamente venenoso asi que Croto se coloca su mascara y los coleoptera solo pueden esperar a que termine el apareamiento para después matar a todos los astrodea.

El humo azul ya se ha desvanecido y Astrod vuela hacia el callejón donde se ha escondido Crato. Las astrodea lo siguen y detrás de ellos los coleoptera. El zumbido de los dos ejércitos retumba en la tierra y hace que Crato vibre con ella. Una esfera azul horada el escondite de Crato. El la toma entendiendo que es un regalo de Astrod.

Las astrodea se dividen en varios grupos. Es claro que desean escapar y eso desespera a los coleoptera: basta que una sola hembra escape para que en dos años sus números ya sean de cientos de miles. Sin duda es un dia aciago para los coleoptera, pero eso solo las hace enojar aún más.